martes, 24 de junio de 2008

TERMINÓ EL CONGRESO NACIONAL DEL PP

¿Habrá paz y buen trabajo a partir de ahora o seguiremos tocando las narices con críticas al partido, en lugar de dirigirlas al gobierno? ¿Seguirán preocupándose aquellos que hablan mal del PP de hoy –y de Rajoy-, en pos de sus propios intereses personales? ¿Continuarán aquellos que berrean contra el PP preocupándose en lo suyo? ¿Habrá quien machaque, aplaste, incordie, repique y escupa sobre el PP, solamente porque no lo dirigen “los suyos”?

Estoy a puntito de perder la confianza en este partido, como creo que nos pasará a muchos votantes del Partido Popular, si no empiezan pronto a trabajar.

Pero a la vez, estoy seguro de que por fin se va a ejercer la oposición.

Eso sí, me temo que con “moscas cojoneras” mediante...

... en fin.

5 comentarios:

Piru dijo...

Eso de ponerse la bandera para defenderse de las críticas era muy de Pujol: no le criticaban a él, criticaban a Cataluña. Ahora, no se critica a Rajoy o se desprecia a Gallardón, sino que se berrea contra el PP. Vale.

Xixarro dijo...

Supongo que te refieres a que esquivo la crítica al líder y a la organización del partido. Pero no es así. Lo que ocurre es que criticar, con el propósito de retirar la confianza en la nueva directiva no favorece al PP ni a su electorado. Si queremos ir por ese camino, mejor caminad solos, porque yo no me apunto. Prefiero aceptar lo que ahora hay, opinar en pos de mejoras -críticar, si se prefiere así-, pero remar en una sola dirección. Si preferimos en cambio derribar a quien ahora ha sido elegido como líder del PP, no avanzaremos nunca.

Nos guste o no, el momento de elegir a otro ya ha pasado. Y o se acepta eso, o no haremos nada. Las reglas del juego son para aceptarlas, tanto si se gana, como si se pierde y no únicamente cuando más nos interese.

Tío Pop dijo...

La crítica nunca es mala, ni siquiera la destructiva, que sirve de acicate para la reacción. Pero sí es cierto que empezamos una nueva etapa. A algunos nos pueden gustar más o menos los nombramientos de nuestro Comité Ejecutivo, de los Portavoces y Secretarios, pero es cierto que ahora, tras el Congreso, Rajoy es nuestro lider.

Bastante tenemos "ahí fuera" como para seguir dando caña en nuestra propia casa. Creo que debemos lealtad a quien ha salido elegido como nuestro Presidente.

Podremos discutir muchas cosas, es cierto, y no es malo ser críticos -como ya decía al principio-. Pero creo que es tiempo de pasar página.

En mi opinión -soy uno de los 3025 compromisarios de Valencia- el Congreso fue una farsa, algo "atado y bien atado" por "el aparato". Existió una hostilidad manifiesta y orquestada hacia Esperanza Aguirre y, por extensión, a todo Madrid. Debemos asimilar que Madrid, aunque creamos que es el centro de la península, es cada vez más una isla. Y hay que obrar en consecuencia.

Si esto ocurre en nuestro propio partido qué no pasará en el resto de los ciudadanos. Tal vez tengamos que dejar de ser la Comunidad más solidaria con el resto de España... ya que no generamos simpatías tal vez nos ganemos amistades por el bolsillo.

Si tengo ganas -y tiempo- os contaré mi experiencia en Valencia con pelos y señales. Lo que vi, lo que sentí, lo que escuché, lo que me gustó, lo que me desesperó... Sin embargo repito lo que decía más arriba: no hay que olvidar -sería un error- pero el resultado es que Rajoy es nuestro Presidente, y aunque sus formas para protegerse en el Congreso y su discurso son discutibles, debemos guardarle lealtad.

Un abrazo a todos.

Xixarro dijo...

Todos a una, Tío Pop, todos a una. Recuérdalo. Ya habrá momento para proponer soluciones alternativas y nuevas.

Ahora, todos auna o esta galera dará vueltas sobre sí misma, en lugar de avanzar.

Y que los voceros se queden solos.

Anónimo dijo...

El PP de Madrid lo más probable es que se secesione del PP nacional y haga un acuerdo con el PP valenciano. Es la lógica de nuestro sistema constitucional: cuanto más pequeños los trozos, mejor..